Marcos Rojo transita las últimas páginas de su etapa en Boca. El experimentado defensor central está "borrado" del plantel profesional y su salida del club es inminente. Si bien su contrato vence en diciembre y no será renovado, el jugador busca resolver su situación cuanto antes para no seguir perdiendo ritmo competitivo.

En ese contexto, surgieron dos caminos principales para continuar su carrera en el fútbol argentino. El primero es un regreso a Estudiantes de La Plata, club en el que se formó y donde le gustaría "pegar la vuelta a City Bell y recuperar el vínculo con la gente del Pincha". Sin embargo, esa posibilidad hoy se encuentra "trabada", ya que Sebastián Verón, presidente del club, "sentó varias condiciones a cumplir" que frenaron el avance de las gestiones.

La segunda opción, más inesperada, es Independiente. El conjunto de Avellaneda sondeó al defensor para conocer su situación contractual y evaluar una posible incorporación en el corto plazo. La iniciativa partió de Diego Colotto, nuevo integrante de la secretaría técnica, quien vio en Rojo una oportunidad de jerarquizar la zaga central. La "movida" fue una gestión exclusiva de la dirigencia y no un pedido del entrenador Julio Vaccari, quien tiene otros nombres en carpeta. La relación entre el DT y los directivos no atraviesa su mejor momento, y se espera una reunión para debatir incorporaciones, donde el nombre de Rojo ya se metió como una alternativa a considerar.

Desde Boca, el Consejo de Fútbol dejó en claro que no rescindirá unilateralmente el contrato del jugador. Solo permitirá su salida si hay un "resarcimiento sobre la mesa", aunque no pondrán trabas por el destino, incluso si se trata de un competidor directo. Lo cierto es que el vínculo entre las partes está desgastado tras varios cortocircuitos, y "ninguna de las partes quiere seguir ligada".

Independiente, además, tiene otra negociación abierta con Boca: la del pase de Marcelo Saracchi. Mientras tanto, el "Rojo" necesita reforzar la defensa tras varias bajas en el actual mercado de pases. El sondeo por Marcos Rojo existió y ahora dependerá de cómo avance el diálogo entre las partes y del visto bueno del cuerpo técnico.

Rojo quiere seguir jugando y busca una salida urgente. Su futuro está abierto, pero el cierre de su ciclo en Boca parece definitivo.